lunes, 16 de septiembre de 2013

Torre del Oro

lunes, 16 de septiembre de 2013 0


La Torre del Oro de Sevilla es una torre albarrana situada en el margen izquierdo del río Guadalquivir, en la ciudad de Sevilla, junto a la plaza de toros de la Real Maestranza. Su altura es de 36 metros. Posiblemente su nombre en árabe era Bury al-dahab, Borg al Azahar, o Borg-al-Azajal en referencia a su brillo dorado que se reflejaba sobre el río. Durante las obras de restauración de 2005, se demostró que este brillo, que hasta entonces se atribuía a un revestimiento de azulejos, era debido a una mezcla de mortero cal y paja prensada.

Es una torre formada por tres cuerpos, El primer cuerpo, dodecagonal, fue construido entre 1220 y 1221 por orden del gobernador almohade de Sevilla, Abù l-Ulà. El segundo cuerpo, también dodecagonal, fue mandado construir por Pedro I el cruel en el siglo XIV. El cuerpo superior, cilíndrico y rematado en cúpula, fue construido en 1760 por el ingeniero militar Sebastián Van der Borcht.

Fue declarada monumento histórico-artístico en 1931 y ha sido restaurada varias veces. En la Edad Contemporánea fue restaurada en 1900, entre 1991 y 1992, en 1995 y en 2005. En su conservación ha sido importante la labor de la Armada. Se encuentra en buen estado de conservación y alberga el Museo Naval de Sevilla.

Historia

Fue construida entre 1220 y 1221 por orden del gobernador almohade de Sevilla, Abù l-Ulà, con una base dodecagonal. Cerraba el paso al Arenal mediante un tramo de muralla que la unía con la Torre de la Plata, que formaba parte de las murallas de Sevilla que defendían el Alcázar. Existe una tradición de que para impedir la entrada al puerto fluvial, se extendió desde su basamento una gruesa cadena sobre el río hasta otra torre ubicada en la actual calle Fortaleza, situada al otro lado del río, en el actual barrio de Triana; dicha leyenda es falsa ya que la La Calle Fortaleza en la orilla de Triana recibe ese nombre en el s.XIX, anteriormente denominada Calle Limones, por otro lado y con más acierto, en las Cronicas realizadas por Alfonso X el Sabio, donde describe al detalle la toma de la ciudad de Sevilla, sólo se menciona una cadena, la que sujetaba el conjunto de barcas que formaba el puente que unía la orilla de Sevilla y la de Triana, que unía además la ciudad con el Castillo, conocido posteriormente como Castillo de San Jorge, en la orilla de Triana.

La flota castellana mandada por el almirante Ramón de Bonifaz rompió el puente en 1248 remontando el río, mientras las tropas de Fernando III de Castilla sitiaban la ciudad. Este pasaje histórico protagonizado por marinos cántabros al servicio de la marina castellana quedó inmortalizado en los escudos de las Cuatro Villas de la Costa de Cantabria (Laredo, Castro Urdiales, Santander y San Vicente de la Barquera) y fue posteriormente incorporado al Escudo de Cantabria. En ellos se representa la Torre del Oro y una nave rompiendo las cadenas que cerraban el paso por el río Guadalquivir.

Tras ser conquistada, se utilizó como capilla dedicada a San Isidoro de Sevilla. Después se utilizó como prisión. Es completamente falsa la leyenda que presenta la torre como almacen del oro y la plata venidos de América.

En el siglo XVI presentaba un estado ruinoso, por lo que se realizó una obra de consolidación. La torre fue dañada gravemente por el terremoto de Lisboa de 1755, tras lo cual el Marqués de Monte Real propuso su demolición para ensanchar el paseo de coches de caballos y hacer más recto el acceso al puente de Triana; sin embargo, ese proyecto no llegó a realizarse por la oposición del pueblo de Sevilla, que llegaron a anunciárselo al rey, quien intervino. En 1760 se arreglaron los desperfectos macizando la planta inferior de la torre, reforzándola con escombros y mortero, y dejando la puerta del paso de ronda de la muralla como puerta de acceso principal. Ese mismo año se construyó el cuerpo cilíndrico superior, obra del ingeniero militar Sebastián Van der Borcht, artífice también de la Real Fábrica de Tabacos. Estas obras cambiaron el aspecto de la torre respecto al que puede observarse en grabados de los siglos XVI o XVII.

La Revolución de 1868 fue otro momento crítico para la torre, pues los revolucionarios demolieron los lienzos de las murallas y los pusieron en venta, pero la oposición de los hispalenses logró que la torre no se destruyera.

Fue restaurada en 1900 por el ingeniero Carlos Halcón. 

El 21 de marzo de 1936 se dispuso la instalación en la torre el Museo Marítimo por orden del Ministerio de Marina. En septiembre de 1942 comenzaron las obras de restauración, durante las cuales se mejoraron el aspecto de la fachada y se habilitaron dos plantas para la exhibición del museo y la tercera para alojar investigadores. El museo se inauguró el 24 de julio de 1944, para lo cual se llevaron 400 piezas del Museo Naval de Madrid. El museo muestra en la actualidad (2008) diversos instrumentos antiguos de navegación y maquetas, además de documentos históricos, grabados y cartas náuticas; y relaciona de Sevilla con el río Guadalquivir y el mar. 

En 2005 fue nuevamente restaurada.

martes, 26 de febrero de 2013

Hotel Alfonso XIII

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El edificio Hotel Alfonso XIII es un edificio histórico situado en Sevilla, entre la Puerta de Jerez, el Palacio de San Telmo y la Fábrica de Tabacos. El hotel es propiedad del Ayuntamiento de Sevilla y actualmente ofrece sus servicios, en régimen de concesión administrativa a través a la cadena hotelera The Luxury Collection by Starwood. En 2011 fue reformado íntegramente y reinagurado el 13 de marzo de 2012.

Historia

Obra del arquitecto José Espiau y Muñoz; fue construido entre 1916 y 1928, e inaugurado oficialmente el 28 de abril de 1929, con la celebración de un suntuoso banquete presidido por el Rey Alfonso XIII y la Reina Victoria Eugenia. El motivo de este banquete fue la boda de la Infanta Isabel con el Conde Juan Zamoyski.
El hotel fue en realidad un proyecto ganador elegido entre tantos otros tras haber sido convocado un concurso bajo la dirección del genial arquitecto Aníbal González. Espiau logró el premio, y levantó un edificio destinado a ser el hotel de la Exposición Iberoamericana de 1929. El propio Rey Alfonso XIII mostró un gran interés en la consecución de las obras y estableciendo indicaciones sobre cómo debían de concluirse algunas zonas.
Está considerado Bien de Interés Cultural desde 1998.

Arquitectura

Arquitectónicamente es de estilo neo-mudéjar, inspirado en la arquitectura árabe, conformando un edificio claramente historico, aunque con un toque regionalista andaluz. Fue diseñado en el primer cuarto del siglo XX, por lo que arquitectónicamente se integra en la estética global del resto de edificios planificados para la Exposición Iberoamericana de 1929. En conjunto, fachada y demás, se observa una importante riqueza de elementos decorativos y detalles, conseguidos con materiales que bien podrían considerarse como pobres o sencillos, puesto que en su mayoría son ladrillo, yeso, madera y cerámica.
En su interior, se destaca la opulencia y categoría, arcos y columnas, todo decorado con lámparas colgadas de elaborados artesonados, así como con finas alfombras de la Real Fábrica de Tapices. También merecen mención los azulejos que decoran paredes, techos y todo tipo de estructuras. Las habitaciones fueron diseñadas para alojar a reyes, presidentes, personalidades y otros invitados de la Exposición Iberoamericana de 1929, por lo que la amplitud es norma general. Los suelos son de mármol y madera.

Salones

En el hotel se hallan seis salones capaces de albergar banquetes de hasta para 650 personas. El Salón Real era el antiguo comedor principal del hotel que destaca por su tamaño y ornamentación. A este se accede a través de una reja forjada de hierro similar a las que cierran los coros de algunas catedrales andaluzas. En el interior, se describen once arañas de cristal de Bohemia y bronce patinado en oro, un artesonado palaciego, grandes puertas en arco orladas de caoba y ladrillo intercalado de azulejos, puertas que dan a la terraza que está sobre el jardín. También son dignos de describir los Salones Andalucía, Híspalis y Cartuja, todos de estilo neoclásico con estucos dorados, puertas y ventanales de arcos enfrentados, arañas de Bohemia y suelos de mármol.

Patio interior

Característico, también, es el patio interior; proyectado originalmente de otra forma e inspirado en el Hospital de los Venerables, y que finalmente se rediseñaría por petición expresa del Alfonso XIII, quien mostró su desacuerdo con el proyecto anterior.

Habitaciones

Tras la reforma realizada en 2011, el hotel cuanta con 151 habitaciones y suites. Las habitaciones tienen un tamaño de entre 20 y 42 metros cuadrados y se dividen en 3 temáticas: habitaciones andaluzas, habitaciones moriscas y habitaciones castellanas. Existen 3 habitaciones deluxe y 6 suites, algunas de 80 metros cuadrados, entre la que está la Suite Real, de 140 metros cuadrados. Una de ellas, la Suite Torreón, cuenta con una terraza propia de 55 metros cuadrados. Además, cuenta con la Suite Reales Alcázares, inspirada en el Alcázar de Sevilla.

domingo, 20 de enero de 2013

Hospital De Las Cinco Llagas, sede del Parlamento de Andalucía

domingo, 20 de enero de 2013 0

El antiguo Hospital de las Cinco Llagas constituye la sede del Parlamento de Andalucía.
Su construcción se inició en 1546 por voluntad de Don Fadrique Enríquez de Ribera, muerto en 1539. Fue diseñado por Martín de Gainza, quien dirigió las obras hasta su muerte, en 1556. Dos años más tarde se encarga la continuación de la obra a Hernán Ruiz II, inaugurándose, aunque incompleto, dos años más tarde.
Su planta es rectangular y se articula en torno a 10 patios, de los que solo se construyeron nueve, conservándose en la actualidad ocho. El elemento más característico del edificio es sin duda su iglesia, es más alta que el resto del edificio. En su interior es donde se celebran actualmente los plenos, destaca su retablo mayor, construido por Diego López Bueno con pinturas de Alonso Vázquez según diseño de Asensio de Maeda.
El edificio funcionó como hospital hasta el año 1972. Tras años de abandono, en 1986 se redactan los proyectos para su conversión en la sede del Parlamento de Andalucía, inaugurándose el 28 de febrero (día de Andalucía) de 1992. La restauración total del edificio finalizó en el año 2003, con la conclusión de los trabajos de recuperación de los patios y estancias que no se hicieron durante los años ochenta. 
Para la construcción presentaron sus diseños los arquitectos Luis de Villafranca, Martín de Gaínza, Francisco Rodríguez Cumplido y Luis de Vega, siendo elegido entre todos ellos el proyecto de Martín de Gaínza, quien se encarga del comienzo de las obras en 1546, dirigiéndolas hasta su muerte. En todo ese tiempo levantó los patios de poniente, las fachadas y las torres, sin los remates.
De un refinamiento exquisito e insuperable clasicismo, su racionalidad y mesura sirvió de exponente de una nueva arquitectura, contrapuesta a la caótica ciudad medieval de intramuros que existía en la Sevilla de su época; y representa una de las mejores muestras de la arquitectura renacentista en toda Andalucía.

Fachadas
El plan de este edificio, el de más envergadura de la España de su tiempo, se basó en el de las fundaciones hospitalarias de los Reyes Católicos, aunque aproximándose más al modelo que en ellos se había copiado, el del Hospital Mayor de Milán, obra de Filarete. Concebido como un gran rectángulo con torres en las esquinas y cuyas fachadas se articulan en dos pisos mediante órdenes clásicos, la inicial simetría de su planta planificada alrededor de cuatro grandes patios fue posteriormente alterada al situarse la iglesia aislada en el centro de uno de ellos. El edificio presenta largas fachadas que se dividen horizontalmente en tres cuerpos mediante molduraciones rematadas por una cornisa. Verticalmente se presentan sus huecos entre pedestales, en los que se apoyan órdenes apilastrados dóricos, y sobre éstos otros jónicos. Los balcones de la planta superior se flanquean entre órdenes abalaustrados, frontones y acróteras, en una ordenación continuada de marcado italianismo.

Iglesia
Decisiva intervención en la obra tiene Hernán Ruiz II, quien después de ser nombrado Maestro Mayor de las obras de este hospital en 1558, termina algunas de las partes que dejó sin acabar Martín de Gaínza, su antecesor, y remata las torres.
Su principal aportación en la construcción consiste en su majestuosa e innovadora iglesia, de planta de cruz latina con cuatro capillas laterales y ábside semicircular delante de la sacristía. Con esta iglesia se inaugura el tipo de las denominadas "de cajón", de tanta trascendencia en la arquitectura sevillana posterior. En sus alzados interiores se levantan, sobre cada dos capillas, altos órdenes jónicos apoyados en ménsulas con diseño de capitel dórico, cubriendo su única nave con tres bóvedas vaídas.
Tanto interior como exteriormente cuenta con bellas portadas de mármol, sobresaliendo la personal interpretación de su autor en la articulación de los elementos y en la ornamentación de su portada principal, situada a los pies, compuesta a modo de arco triunfal romano donde se incluye un medallón con emblemas de la fe, la esperanza y la caridad, esculpidos por Juan Bautista Vázquez El Viejo en 1564.

Portada
Tras la muerte de Hernán Ruiz II (1569) le sucede en las obras el italiano Bevenuto Tortello, quien en los escasos tres años que duró su presencia al frente de ellas poco o nada queda reconocible.
Ya en el siglo XVII le corresponde a Asensio de Maeda, por entonces maestro mayor de las obras de este hospital, realizar su fachada principal y levantar en ella su gran portada de acceso, la parte más representativa del conjunto, según las trazas dadas por Miguel de Zumárraga; obra de claro de carácter manierista de 1618.

Jardines
El edificio presenta su fachada principal precedida por un amplio espacio ajardinado dividido en dos zonas bien diferenciadas entre los que se levanta una alta y amplia verja de hierro. la más exterior, más amplia y con arbolado de mayor porte, abierta para su acceso para el público general; y la más cercana al edificio, realizada a base de setos cuidadosamente recortados que se distribuyen según un trazado simétrico y muy ordenado, adecuado a la solemnidad y el clasicismo de la fachada, de acceso restringido. En este espacio interior se ha incluido posteriormente el grupo escultórico de “el Hércules” que se realizó para la Exposición Universal (la Expo´92), y que estuvo ubicada durante el evento delante del Pabellón de Andalucía.

sábado, 19 de enero de 2013

Palacio de San Telmo

sábado, 19 de enero de 2013 0


El Palacio de San Telmo es un edificio de estilo barroco, su construcción se inició en 1682 para instalar la sede del colegio-seminario de la Universidad de Mercaderes, y en la actualidad alberga la Presidencia de la Junta de Andalucía.

Historia

El 10 de marzo de 1682 se inició la construcción del edificio sobre unos terrenos ubicados extramuros de la ciudad, que eran propiedad del Tribunal de la Inquisición, para instalar en él la sede del colegio-seminario de la Universidad de Mercaderes, institución que acogía y formaba a huérfanos de marineros, y que se convirtió un siglo después en el Colegio de la Marina, en el que ingresó el poeta Gustavo Adolfo Bécquer. A partir de 1847 dejó esa función, y fue destinado para diferentes usos, siendo sede de la Sociedad del Ferrocarril o de la Universidad Literaria.

En 1849 fue adquirido por Antonio de Orleans y Luisa Fernanda de Borbón, duques de Montpensier, que lo convirtieron en su residencia oficial.

Al fallecer en 1897 la infanta María Luisa Fernanda, duquesa viuda de Montpensier, donó el palacio a la Archidiócesis de Sevilla y cediendo sus jardines, que hoy forman el Parque de María Luisa, a la ciudad de Sevilla.

En 1901, siendo arzobispo de la ciudad Marcelo Spínola, el palacio se convirtió en seminario, hasta el año 1989 en que fue cedido por el arzobispado de Sevilla a la Junta de Andalucía, para albergar la sede del gobierno autonómico.

En 1991 comenzó su rehabilitación para convertirlo en sede oficial de la presidencia de la Junta de Andalucía, iniciándose en 2005 una segunda fase de restauración centrada principalmente en rescatar la estructura original y detalles del interior del edificio.

Descripción

Es uno de los edificios emblemáticos de la arquitectura barroca sevillana, dispone de planta rectangular con varios patios interiores, uno de ellos central, torres en las cuatro esquinas, capilla y jardines. La capilla, a la que se accede desde uno de los patios es obra del arquitecto Leonardo de Figueroa, y es un  magnífico barroquismo. Está presidida por la imagen de Nuestra Señora del Buen Aire, una talla de principios del siglo XVII.

En su fachada principal destaca la magnífica portada de estilo barroco terminada en 1754, su coste fue de 50.000 pesos. La portada presenta tres cuerpos. El primero está compuesto por una puerta flanqueada con tres columnas a cada lado; el segundo por un balcón sostenido por atlantes con aspectos de indios, rodean el balcón doce figuras de mujer, alegóricas de las ciencias y las artes relacionadas con los estudios de náutica. Remata la fachada un conjunto en el que, enmarcada por columnas, se encuentra la figura de San Telmo, patrón de los navegantes, flanqueado por los patronos de la ciudad: San Fernando y San Hermenegildo.

 
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